miércoles, 29 de febrero de 2012

Morir de repente

Volvemos después de unas reparadoras vacaciones, durante las cuáles se produjo una de las tragedias más tremendas en la historia del transporte argentino. Una situación que de ningún modo puede ser tildada de accidental.

Ante esto, analizamos brevemente:

 - No recuerdo a los sindicatos de ferroviarios y la Fraternidad haciendo paros porque la infraestructura es insegura. Desde la Varietè siempre defendemos al laburante, nunca a los sindicalistas colaboracionistas. Y acá olfateamos colaboracionismo, una especie de "¿cuánto querés para no parar los trenes?".


 - Acompañamos el dolor tremendo de las familias de todas las víctimas. TODAS. Se hizo hincapié en muchas historias particulares, pero para nosotros las 51 víctimas son, precisamente, víctimas de la negligencia. Por igual. Las distinciones son herramientas de los medios, que buscan embutir una estructura dramática en su tratamiento de las noticias (me refiero a drama como desarrollo de una historia).

 - Hacemos centro, entonces, en el problema más grave a nuestro entender. Hay 51 personas que fallecieron porque el Estado y las empresas que controlan el servicio de trenes ignoraron sistemáticamente las necesidades infraestructurales de la traza ferroviaria. Los informes realizados por las mismas autoridades estatales correspondientes fueron ignorados por empresa y Estado, con la connivencia de los dirigentes sindicales, a nuestro entender. Más grave aún: LOS TRENES SIGUEN FUNCIONANDO ASI. No es que desde ayer se solucionó el tema. Las reparaciones van a llevar años, y posiblemente, tras el fragor de esta tragedia horrible caigan una vez más en el olvido.

Nos da la impresión de que esa es una responsabilidad de todos. Que semejante horror nos ayude a no olvidarnos de que ciertas cosas suceden todos los días, bajo nuestra atenta mirada. Y que las críticas a los gobiernos deben ir por ese lado; por el lado de las cosas que, en el día a día, se nos pasan de largo. Y de repente te matan.



EX POST: Sale hoy, 7 de marzo, una nota en la que Rubén "Pollo" Sobrero afirma que se entregaron más de 300 informes desde el sindicato, respecto del estado de los trenes. Todo bien, pero por que no un parito? No es esa la medida que más presión pone sobre una cuestión?

martes, 14 de febrero de 2012

Malvinas

Se habla, y mucho, de las Malvinas. Es un tema para nosotros urticante. Se ha utilizado muchas veces con fines políticos, y, a nuestro entender, se lo utiliza ahora de nuevo, en Gran Bretaña y en la Argentina.

Varios opinaron y opinan al respecto. Lanata y Mempo Giardinelli se trenzaron en singular disputa, y con el mucho respeto que me merece Mempo, y el poco que ostenta hoy Lanata, creo que ambos se equivocan. Y se equivoca también Luis Alberto Romero hoy.

Hay algo que no entiendo. Wikipedia dice que la Convención sobre los Derechos del Mar reafirma los derechos de los Estados Ribereños sobre "el lecho y el subsuelo de las áreas submarinas que se extienden más allá de su mar territorial y a todo lo largo de la prolongación natural de su territorio hasta el borde exterior del margen continental, o bien hasta una distancia de 200 millas marinas contadas desde las líneas de base a partir de las cuales se mide la anchura del mar territorial, en los casos en que el borde exterior del margen continental no llegue a esa distancia".

Sin embargo aclara que "Los puntos fijos que constituyen la línea del límite exterior de la plataforma continental en el lecho del mar, deben estar situados a una distancia que no exceda de 350 millas marinas contadas desde las líneas de base a partir de las cuales se mide la anchura del mar territorial o de 100 millas marinas contadas desde la isobata de 2.500 metros, que es una línea que une profundidades de 2.500 metros". Argentina, como signataria de la Convención, presentó en 2009 estudios que afirman su predominio geográfico sobre 350 millas marinas.

Las Malvinas se encuentran a 464 kilómetros de la costa, mientras que 350 millas marinas son unos 650 kilómetros, moneda más moneda menos. Es decir, de acuerdo con esto, las Malvinas pertenencen al territorio argentino.

Romero dice que el sustento de una nación no debe ser sólo territorial, ni sólo el peronismo, ni ninguna cosa sola. Correcto. Dice también muchas cosas que nos parecen equivocadas, e incluso varios comentarios al pie de la nota le recuerdan datos que él no incluye.

Lo que si vamos a resaltar es esta frase: "no habrá solución argentina a la cuestión de Malvinas hasta que sus habitantes quieran ser argentinos e ingresen voluntariamente como ciudadanos a su nuevo Estado".

No estamos de acuerdo. Para nada. Por varios motivos. Pero principalmente porque los habitantes de Malvinas pueden, si quieren mantener su nacionalidad, así como la mantienen tantos extranjeros en el país. La gente que vive allí puede seguir siendo lo que le parezca. Pero el territorio, más allá de consideraciones antropológicas o históricas sobre la nación argentina, es nuestro. Argentino.

Y acá, entonces, viene la canallada: "Es cierto que la Argentina tiene sobre Malvinas derechos legítimos para esgrimirlos en una mesa de negociaciones con Gran Bretaña. Pero no son derechos absolutos e incuestionables. Se basan en premisas no compartidas por todos. Del otro lado argumentan a partir de otras premisas. Si creemos en el valor de la discusión, debemos escucharlas".

Yo me equivoco, o es Gran Bretaña la que no quiere sentarse a negociar? Yo me equivoco, o el PM Cameron dijo que iba a respetar el derecho de autodeterminación de los isleños y que si ellos quieren seguir siendo británicos no había discusión?

La Argentina aceptó la mediación de la ONU. Les anticipo lo que va a pasar. Si la ONU falla a favor de Argentina, el Reino Unido vetará la decisión. Si no, miren lo que pasa con España y Gibraltar.  

viernes, 10 de febrero de 2012

Ley Antiterrorista

Me preocupa. La ley Antiterrorista es, digamos, top 3 de lo que me preocupa del país hoy, junto con la redistribución del ingreso y la calidad política.

La ley se aplicó ya y ahora nos enteramos de un episodio de represión policial, en Tinogasta, Catamarca. Por protestar contra una minera.

Estemos atentos.

jueves, 9 de febrero de 2012

Despedida

Como en toda buena reflexión, habrá que dejar que se asiente la polvadera, que amaine el temporal, y que dejen de amontonarse las lágrimas para hablar de Luis Alberto Spinetta.

Por ahora solamente se puede escribir sintiendo, esas primeras palabras que salen de la memoria afectiva, de los recuerdos gratos y dolorosos, de la participación, inmensa, sustantiva, del Flaco en la banda sonora de los días.

Ahora veo la gente aplaudiéndo mientras lo que solía ser el Flaco sale, por última vez, de su casa. No es un grupo de clacs contratados, son sus vecinos, que lo quieren. Leo las palabras de su Muchacha.

Veo en Facebook que mi amigo Luis Faraoni, hueso duro de roer, llora con los posteos de canciones. Comparto el sentimiento de otro amigo, Roly Villani, cuando habla de los recitales de la primavera alfonsinista, cuando él era adolescente y yo tenía 5 años. Lo comparto porque yo también fui adolescente, a mi también me rompieron la cabeza canciones que luego el Flaco mismo tildaría de "decorativas", en otra muestra de madurez y humildad.

Leo la despedida de Pedro Aznar, emotiva. Lloro un poco, yo también.

Yo, que tuve mi primer contacto con el Rock Nacional con Yendo de la Cama al Living, que lo único alfonsinista que viví fue el Pacto de Olivos y que crecí a la sombra de los que crecieron en la luz del Flaco, recupero el día en que un profesor me hizo escuchar "Que el viento borró tus manos",  el tema "Peluca Telefónica" en el que Flaco pide pilas para el walkman, Pescado, Jade y todas esas cosas que nos quedan.

Seguramente, después de la tristeza inicial, solo algunos pocos, su familia y sus seres queridos, extrañarán a Luis Alberto. Los demás continuaremos con nuestra vida de policías rebeldes y tarjetas SUBE.

Pero, en algún momento, te vas a enamorar. O le vas a querer cantar a tu hijo. O vas a querer prender todo fuego, con una frase suave y demoledora. Ahi, justo en ese instante, el Flaco va a poner las palabras. Como siempre.




martes, 7 de febrero de 2012

Y volver a empezar

Luego de un impasse de algunos meses, en los que varios opinólogos se dedicaron a menudencias varias, vuelve a empezar la operatoria para azuzar a la oposición a coaligarse.

Recordemos: acá, y acá, e inclusive hace mucho tiempo acá, entre otros posts, mencionamos a la oposición y los pedidos, en algún caso velados, de mantener esa unión por el espanto. Se vio marcadamente en las últimas elecciones presidenciales, en donde se preveía el triunfo de Cristina en primera vuelta, y muchos suponían que la única forma de desbarrancar al kirchnerismo era unirse a como de lugar.

Bueno, the opinologists are back! Si señores, vuelve el mensaje de opositores-ponganse-las-pilas, de la mano de un abanderado en estos temas, como Marcos Aguinis.

Resaltan algunos lugares comunes. Por ejemplo, el famoso "el 46% de la gente no voto al gobierno", popularizado por la Pitonisa de Barrio Norte. También las menciones de " monarquía, poder absolutista, culto de la personalidad, presidencia "eterna"", utilizado hasta el hartazgo antes de las elecciones.


"Ya es un dato irrefutable que el temperamento de la Presidenta impide el diálogo", dice Aguinis. Y después de un palito para los opositores ("encerrados en el narcisismo, semiciegos, obstinados, desprovistos de grandeza, con virtudes disímiles e incompletas, ocupados a tiempo completo en tareas liliputienses") apela a la inevitable comparación con Venezuela.

Tira "datos". "Cada vez estamos más abajo que Brasil, Chile, Colombia, Perú y hasta Uruguay", explica el pensador, soslayando que estar por abajo de Uruguay es más vergonzoso aun que el resto.

Yo no se si estamos más abajo. Habría que definir, primeramente, abajo respecto de que. No se si el 46% de gente que no votó al oficialismo comparte una misma idea. Justamente ese es el motivo por el que, mientras que Alfonsín sacó 10 y Binner sacó 15, Cristina sacó 54. Tampoco estoy seguro de que ese 54 comparta una misma idea.

Yo si estoy seguro de algunas cosas. La primera es que la oposición, más allá de coaligarse, necesita dirigentes competentes. Dirigentes dispuestos a gobernar (no sólo gobierna el presidente) y a cogobernar más allá de la infame disyuntiva instalada por el kirchnerismo y a la que adscribieron los demás. Dispuestos a apoyar iniciativas válidas, y luchar contra aquellas que no lo son. Vale hacer algunas salvedades; existen dirigentes de mucho valor. Pero son los menos, e incluyo aquí a opositores y oficialistas.

Las alianzas, más allá de "la" Alianza, son herramientas de cuidado. Si se trata de alianzas programáticas, pueden ser válidas. Si es un cúmulo de dirigentes que van juntos porque separados no les da el piné, es hambre para hoy y para mañana.

Estoy seguro, también, de que 54% de los votos es una suma que no debe despreciarse. Aun los que no votamos a Cristina debemos entender que es un triunfo que encierra, si, errores de la oposición, y también aciertos del gobierno. Un gobierno que hasta aquí esquivó muchos de los problemas que se antojaron "inevitables". Y que tiene muchos inconvenientes que no se le critican demasiado.

Pero por sobre todas las cosas estoy seguro de que los debates en los términos en los que los plantea Aguinis son improcedentes. Y frente a eso, rescato a otros, como Mempo Giardinelli, como Martín Caparrós, y algunos otros. Gente que entendió, que entiende desde hace mucho, cuál es la altura a la que tiene que estar el debate.

El resto es propaganda. 

jueves, 2 de febrero de 2012

A comer

Encontramos una preciosidad de preciosidades en la revista Mother Jones, que recomendamos intensamente. Se trata de una nota de su habitual editor de agricultura y alimentación, Tom Philpott, que habla de las diferencias entre el fast food y la comida casera en tanto costos.

El meollo de la cuestión es si verdaderamente cuesta menos comprar comida en McDonalds o cocinarla en casa. Acá hay una infografía con los precios de los Estados Unidos, publicada en el Times. En el diagrama se ve que la hamburguesa cuesta el doble.

Pero Philpott agrega que al precio de la comida casera hay que agregarle el cocinar, el lavar los platos, etc. eso también entra en el costo, un costo no menor a la hora de evaluar ambas opciones.

Cuál es la solucion que da el autor? Empezar un cambio cultural que permita disfrutar de la cocina. La chef y escritora Tamar Adler afirma que la tendencia a tomar a los chefs como personajes famosos radica en que cocinar se ha transformado en algo ajeno. Y yo agrego que muchas de las recetas que se hacen hoy en programas que cocinan "como en casa" son recetas que ya no se hacen más en casa.

Entonces la idea sería empezar a disfrutar del momento de la cocina. Tratar de celebrar que estamos comiendo comida de verdad, digamos. Reemplazar ese disfrute por otros menos saludables, como mirar TV.

Por otro lado, sería importante que los gobiernos empezaran a exigirle a las cadenas de comidas rápidas que paguen lo que corresponde. Como ejemplo, la hora promedio en EEUU se paga 16 dólares. Ronald y sus amigos pagan 8.

Así que vamos a celebrar. Les voy a pasar una receta que suelo hacer. No está copiada de ningún lado, aclaro.

Les doy una lista de ingredientes básicos:

Aceite de oliva: 2 cucharadas.
Arroz: Un pocillo por comensal (para más de 4, agregar una cucharada de aceite)
Ajo: un diente
Agua: cantidad necesaria.
Pimienta, sal y queso rallado: a gusto

Bien, entonces: coloquen una sartén en el fuego. Déjen que se caliente unos 30 segundos aprox, y luego colocar el aceite. Agregar el diente de ajo pelado y aplastado. Dejar 5 segundos más, y agregar el arroz, así, sobre el aceite caliente. Revolver el arroz hasta que se dore apenas, y agregar agua hasta cubrir. Agregar sal, y pimienta. Cuando se consume el agua, el arroz está listo. Servir con queso rallado.

Eso es lo básico. A eso le pueden agregar:

Salchichas: las agregan cuando agregan el agua, cortadas en trozos.
Jamón cocido o paleta: lo agregan hacia el final, para que se caliente, o bien lo saltean con el arroz al principio.
Verduras frescas/congeladas: cuando agregan el agua.
Reemplazar el agua con caldo.
Atún: si es fresco, saltearlo primero y luego agregar el arroz. Si es de lata, hacia el final.

Y todo lo que se les ocurra!


No entiendo...

... por qué Cristina Kirchner llama "vetador serial" a Mauricio Macri. Aclaro: la cantidad de vetos de Macri me parece excesiva. En más de una oportunidad la opinión pública se rasgó las vestiduras porque Cristina, si no tenía apoyo legislativo, iba a gobernar por decreto. Eso no sucedió, ni mucho menos. Si lo hizo Mauricio, ante la atenta mirada de legisladores propios y ajenos, y sin que nadie se aflija.

A pesar de eso, se me ocurre que a Cristina le hubiese convenido guardarse esa carta. Si Macri ganó con el 40 y tantos porciento de los votos, y se le ocurre vetar leyes, bueno, es un problema de quienes votan en Capital. Así como a Cristina la votaron a pesar de la inflación, a Macri lo votaron a pesar de los vetos, y de las subejecuciones presupuestarias, etc. Incluso habrá quienes lo votaron por eso.

Criticándo la situación a voz viva, Cristina le da espacio a réplica a Vidal, que es un personaje de otra estatura. No es lo mismo pelear con Macri (futuro rival presidencial), o con Moyano (namber uan sindical), o con Clarín (diario más leído de habla hispana), que con la vicejefa de gobierno. Me explico? Todo mi respeto a Vidal, pero las cosas como son.


... como es que cada vez que llueve un poco más que una garúa, la ciudad tiene problemas. Que onda? Todas las lluvias más o menos fuertes están por arriba de la media? Tanto subió la media en los últimos años?


... esta frase:

"(...) la presidenta Cristina Fernández hará todo lo posible por eternizarse en el poder. Y usará todas las herramientas políticas para lograrlo, aunque se encuentren al borde de la legalidad. ¿Cómo se puede asegurar semejante cosa si todavía nadie lo ha dicho de manera explícita?, se preguntará el lector desprevenido. Porque la necesidad de perpetuidad está grabada en el ADN de Ella (...)"

Pertenece, claro, a la nota linkeada. La firma Luis Majul. Lo que no entiendo son algunas cosas. Primero, la cuestión del "borde" de la legalidad. Si un presidente (supongansé, Menem) se junta con los demás líderes (supongan, Alfonsín Padre) y arreglan modificar la Constitución, eso es tan legal como vetar muchas leyes. Está en la Constitución, es legal. Listo. No está ni "en el borde", ni "en el medio". Es feo. No nos gusta. NO lo queremos. Pero es legal.

Segundo, el tema del ADN. Ustedes conocen algún dirigente de algún ejecutivo provincial, nacional, municipal, de clubes de fútbol,  que NO QUIERA seguir en su cargo? Esta es una discusión loca, pero una vez que atás la vaca, no dejás nunca de tomar leche. Me explico? Yo solamente recuerdo a Tabaré Vázquez y a Binner. El resto siempre quisieron seguir. Y si no fijensé cuántos presidentes norteamericanos no tuvieron dos períodos en los últimos 100 años. Creo, creo que ninguno.

Y además: Que sabe Majul del ADN?