¿Alguna vez sintieron la necesidad o el deseo de haber vivido una época distinta de la que les tocó vivir? Seguramente.
El otro día pensaba lo bueno que hubiese sido tener 17 años en los ’60. Haber visto la primera época de Dylan, los Beatles; haber enganchado los inicios de muchas bandas fundacionales del rock mundial.
O haber vivido los ’40 y los inicios del blues, el gospel, el jazz. El Charleston y los mafiosos.
Y sin embargo, uno pertenece a su tiempo. Es obvio que uno añora aquello que no vivió; y se me ocurre que, de haberlo vivido, probablemente no nos hubiese parecido tan importante. Digo, haber podido comprar el Álbum Blanco el día que salió le hubiese sacado la emoción de comprarlo hoy, sabiendo que es uno de los mejores discos de la historia.
No se bien adónde lleva esta reflexión. Tal vez al hecho de que probablemente futuros nostálgicos nos envidien, como parte de su cualidad humana, cualidad que en ellos y en nosotros es y será inevitable.
No hay comentarios:
Publicar un comentario