martes, 27 de enero de 2015

Desinteligencias.

Es muy difícil encarar un post con el tema de la muerte del fiscal Alberto Nisman. Muy difícil en vista de la enorme cantidad de elementos que hasta acá no se analizaron, de aquellos que se analizaron erróneamente o de forma apresurada, de aquellos pocos que se saben con certeza, y de los muchos que posiblemente nunca sepamos. Voy a decir algunas cosas, porque desafortunadamente evitar el tema en un blog periodístico puede lucir como una esquivada de bulto en lugar de como un reconocimiento de ignorancia.

Doy por entendido que, quienes lean, estarán al tanto del tema de base. Probablemente sean imprecisiones. Pido, desde ya, disculpas.

Quiero decir, primero: el Memorándum con Irán me parece discutible. Muy discutible. Pero no creo que el hecho de que sea una mala decisión lo transforme en un vehículo para la impunidad. Es un memo firmado en el Congreso, lo que significa que pasó por las manos de todos los legisladores. Y no recuerdo que ninguno haya mencionado nada al respecto. Además, al día de hoy, está detenido. Y recordemos que en 21 años, el avance, sin Memorándum, fue exactamente 0.

En cuanto a las embajadas paralelas, si existen, han sido muy poco efectivas, al menos en cuanto a los objetivos que Nisman denunció que perseguían. Interpol mantiene las alertas rojas, el comercio con Irán viene en caída. Y la verdad es que acordar con Irán, lo que implicaría ponerse en la mira de toda la inteligencia occidental, y enemistarse con la comunidad judía, para cambiar granos por un petróleo crudo que la Argentina no necesita, es un plan berreta.

Leí la denuncia de Nisman. No me parece sólida. Pero no soy abogado. Así que no digo más que eso.

Creo que el principal problema del kirchnerismo es haber pensado que la SI se maneja igual que los intendentes del conurbano. A los "barones" con la caja y los votos se los cancherea fácil. Los "servicios" funcionan diferente. Por algo perduran desde hace décadas.

Circuló mucho en las redes sociales, pero igual me permito compartirles este post de Sebastián Lacunza, editor jefe del Buenos Aires Herald. Creo que es un racconto interesante del funcionamiento de la inteligencia en la Argentina. Y un llamado de atención que, como dijo por ahi Verbitsky, se escucha tarde.

Si alguien me preguntara por dónde va a aparecer el culpable de la muerte de Nisman, yo diría que viene por el lado de los Servicios de Inteligencia. Y en base a los recientes anuncios de Cristina Fernández, es posible que estemos viendo sólo el principio.

No hay comentarios: