martes, 8 de julio de 2014

Do as I say

Resulta que el Señador estadounidense Robert Menéndez (Demócrata de New Jersey) fue inculpado por pagar por sexo. Sin embargo, la mujer que inicialmente declaró que había tenido relaciones con Menéndez a cambio de dinero se desdijo, y reconoció que nunca había conocido al senador.

Ahora bien, Menéndez culpa a servicios de inteligencia cubanos por intentar inculparlo, en medio de un ascenso en su carrera política. El senador aborrece al regimen de Castro.

No me voy a meter en ninguno de los temas picantes que encierra este caso (ni el sexo por dinero, ni si Castro si o no, nada). Pero si me quedo con una frase del abogado de Menéndez, Stephen Ryan:

“It is deeply disturbing that a foreign government whose intelligence service is an enemy of the United States might try to influence U.S. foreign policy by discrediting an elected official who is an opponent of the Cuban regime,”

O sea: "Es muy preocupante que un gobierno extranjero cuyo servicio de inteligencia es un enemigo de los Estados Unidos intente influenciar a la política exterior estadounidense al desacreditar un funcionario electo que es oponente del regimen cubano".

Efectivamente, que un servicio de inteligencia intente modificar, amedrentar, hostigar o condicionar a otros gobiernos o particulares es realmente muy preocupante.

Y un dato curioso: los padres de Menéndez se fueron de Cuba en 1953. De acuerdo con Wikipedia, abandonaron la isla por estar en desacuerdo con el regimen de Batista... 







No hay comentarios: